¿QUÉ DEMOCRACIA FESTEJA EL GOBIERNO?
“Es
necesario comprender quién pone en práctica la violencia:
si son los que provocan la miseria o los que luchan
contra ella”
Julio Cortázar
Mientras el gobierno nacional festeja con bombos,
platillos y mucho cotillón los 30 años de democracia ininterrumpida, el pueblo
sufre las políticas de ajuste, la extorsión policial y la represión fogoneada
por los grandes medios. Ya son más de 8 los asesinados en los últimos días en
una crisis originada por un reclamo de un sector de las fuerzas represivas.
Así mismo, los grandes medios de comunicación ponen
el grito en el cielo ante los saqueos criminalizando, condenando a quienes los
realizan omitiendo un hecho fundamental: si bien podemos suponer que los
saqueos no comenzaron como algo espontáneo sino impulsados para dirimir una
interna de poder al interior de las fuerzas represivas y del estado, lo cierto
es que ello opera sobre una base real, la profunda desigualdad social que se
vive en nuestras provincias, la pobreza, la marginación y la explotación a la
que es sometido nuestro pueblo trabajador.
De la misma forma que callan las condiciones de
pauperización total de la vida de grandes masas de trabajadores, callan también
la identidad de los verdaderos saqueadores de nuestro país: Monsanto, la
Barrick Gold, Chevrrón, sin dejar de mencionar a los gobiernos que preparan el
terreno para que empresarios locales como extranjeros hagan negocios sobre la
explotación de la fuerza de trabajo de nuestro pueblo y nuestros recursos
naturales.
El reclamo policial no es legítimo. Como ya dijimos
antes, y queda ampliamente demostrado, los miembros de las fuerzas represivas
no son compañeros. El hecho de tener una relación salarial no los hace parte de
la clase trabajadora, su función social es reprimir al pueblo trabajador cuando
se rebela en pos de custodiar la propiedad privada, garantizando la
reproducción del capital.
No es novedad que los grandes medios pidan represión
en unos casos, justifiquen la violencia en otros, y la condenen cuando es el
pueblo el que de manera organizada o espontánea, con un fin político o por mera
supervivencia, la ejerce.
Lo mismo sucede en el silenciado caso de los
petroleros de Las Heras: los compañeros pueden ser condenados por la muerte del
represor Sayago en el marco de una movilización popular que exigía la libertad
de un compañero detenido y el cese de la represión constante a los trabajadores
en la provincia de Santa Cruz.
Es muy importante que demos estos debates y
defendamos la legitimidad de los trabajadores y el pueblo de defender sus
derechos y avanzar en sus reivindicaciones luchando en las calles.
Organización de Trabajadores Revolucionarios – 11
de diciembre de 2013